Aquella gesta de 1980

Viajaron en busca de una hazaña y la consiguieron, envalentonados por el título sudamericano que el año anterior habían logrado en Bahía Blanca y con un entrenador de La Plata que los convenció que era posible. Y lo cierto es que lo fue. El 25 de abril de 1980 Argentina clasificó a los Juegos Olímpicos de Moscú, algo que nuestro básquet no conseguía desde 1952, con la generación de los campeones del mundo que terminaron absurdamente suspendidos de por vida.

Carlos Alberto González, Jorge Oscar Martín, Luis Alberto González, Gabriel Roque Milovich, Gustavo Fermín Aguirre, Adolfo Rubén Perazzo (arriba), José Luis Pagella, Eduardo Osvaldo Cadillac, Carlos Eduardo Romano, Miguel Alberto Cortijo, Mauricio Esteban Musso y Carlos Alberto Raffaelli (abajo) fueron los 12 que le dieron forma a aquella gesta en San Juan de Puerto Rico, dirigidos por el platense Miguel Angel Ripullone. "Tuvimos un muy buen entrenador a la edad justa", le dijo Chocolate Raffaelli en la semana a Básquet Plus, destacando el trabajo de Bala.

Allí perdieron con el local (99-93) y Canadá (89-86), pero vencieron a México (104-79), Uruguay (97-86), Brasil (118-98) y Cuba (86-75), con lo que se subieron al podio y consiguieron una de las tres plazas que entregaba ese Preolímpico. Después, la dictadura de Videla decidió que la delegación nacional no viajara, plegándose al boicot yanqui, y ellos se quedaron sin vivir los Juegos. Pero está prohibido olvidar el premio que ganaron en la cancha, y del que hoy se están cumpliendo 40 años.