Los pibes de hoy no la conocen, pero a los que ya peinan canas seguro que se les pianta un lagrimón a la hora de recordar
la revista Encestando, que nació en Bahía Blanca y desde
allí se proyectó a todo el país. Su primer número apareció en 1975 y en la tapa estaban, haciendo justicia, Fruet, Cabrera y De Lizaso, la sagrada trinidad de
la capital del básquet. La publicación llegaba mensualmente a los kioscos una década antes que naciera la Liga Nacional, la competencia que revolucionó nuestro deporte y la hizo circular por todo el país. Formó lectores y público para el deporte, cuando la TV era una rareza y las estrellas llegaban por fotos mucho más que por imágenes en movimiento. Fue referencia, marcó agenda, se hizo necesaria. En un mundo sin Internet, era una compra obligada para tener la información al detalle. Fueron 25 años, hasta que la muerte se llevó a su mentor, Miguel Angel Mazza. "Profundo dolor", fue el último título de tapa de la revista, que
salió por última vez el 18 de agosto del año 2000, hace exactamente 20 años. (Foto diario La Nueva Provincia)
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