En la previa, Fabián Renda comparó la acción en cada sede con jugar un Provincial, algo que casi todo el plantel conoce muy bien. Son muchos juegos en poco tiempo, sin descanso y casi sin entrenar en el medio. Encima, en una época del año donde hace mucho calor. Por eso, la receta fue rotar mucho el personal, alargar el equipo lo máximo posible y aprovechar el ingreso de los jóvenes para mantener la intensidad. En Lanús, al menos, la prueba se superó con creces. Lo prueba la tabla de posiciones, donde acumula tres victorias en cuatro partidos.
Está a la vista, el Lobo hoy no tiene una torre, como fueron Dentis o Woodson la temporada pasada. Pero así y todo ganó la lucha de los rebotes en los cuatro encuentros disputados y tiene al sorprendente máximo taponador de la competencia: Nicolás Gianella. Sí, el pibe de 43 pone más de una tapa por juego y es el líder del torneo en ese rubro, aunque apenas juega 20 minutos y en dos partidos decidieron cuidarlo. Cuando está en cancha, claro, su calidad marca la diferencia y los otros pibes cumplieron muy bien. Yago Sánchez, Acuña, Rosende y Lancieri aportan buena defensa, piernas frescas, brazos largos y han sumado en ataque más de lo que se esperaba.
Entre los grandes, Pablo Alderete es el jugador franquicia y líder en la pintura. Séptimo goleador y reboteador en el inicio de la competencia, Top 5 en las estadísticas individuales y el que más faltas recibe de la Liga Argentina (más de siete por juego). Lógicamente es el que más juega (32 minutos), seguido por Remolina (28,9), Cejas (26,5) y Wall (20,7). El de Temperley ya está consolidado como el base titular por su ritmo y traslado seguro, mientras que Gaby y Juampi están haciendo su adaptación a la categoría tras muchos años en el Federal. ¿Explotarán en la sede que se viene? A partir del miércoles lo podremos comprobar... (Foto prensa GELP)
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