Victoria para empezar a sanar

Casi un año después de la gran decepción de quedarse afuera del Mundial, la selección nacional volvió a presentarse en el Polideportivo de Mar del Plata. Esta vez fue en el inicio de los Clasificatorios para la Americup y en un partido bastante más parejo de lo esperado, pero que terminó inclinando a su favor por la jerarquía de sus figuras, Argentina le ganó 90-78 a Chile y arrancó con el pie derecho el camino hacia la defensa del título que consiguió en Brasil 2022. Con un cinco inicial de calidad indudable, se escapó 17-7 enseguida, con Brussino como líder anotador y Campazzo manejando la batuta de un equipo que se sintió cómodo corriendo en cancha abierta. Herman Mandole (en su debut como DT interino guardando el puesto de Prigioni) rotó mucho los minutos, y así al equipo le costó mantener la identidad y se fue deshilachando con el correr de los minutos. Los trasandinos se metieron en partido por Suárez y Herrera (5 de 5 triples en la noche) y el público tomó nota, silbando rivales y saltando de las butacas para celebrar aciertos. 50-43 al entretiempo, el marcador estaba corto aunque se olía en el ambiente que cuando los nuestros entraran en ritmo lo iban a definir. Y así fue, con Delía como baluarte defensivo, Deck lastimando por dentro y por fuera, Bolmaro haciendo un poco de todo, Redivo sumando su tiro externo y los Juanes (Marcos y Fernández) trayendo minutos de calidad. Los pibes Corbalán, Bressán, Bocca y Giovanetti tuvieron minutos testimoniales y habrá que ver si suman más participación en la revancha del domingo, cuando haya que ser visitantes en Valdivia. Ahora era necesario ganar, y la victoria llegó con los esperados aplausos de la tribuna, muy necesarios para comenzar a sanar las heridas. Que no es poco, claro que no. (Foto FIBA)