Los dos fueron compañeros de la selección en el momento más glorioso de la historia del básquet argentino.
Walter Herrmann y Gabriel Fernández hace rato que no se ponen la camiseta celeste y blanca, pero por siempre estarán en la historia como parte del equipo campeón olímpico de Atenas 2004. Y si bien hace rato que no juegan en el máximo nivel, no se alejan de la naranja.
Herrmann, en la foto de arriba reporteado por el platense Diego Ruscitti, juega con sus amigos del equipo de Ciudad, en la liga local de Venado Tuerto. Y a Fernández, que hace un año está inactivo, también le dio por lo sentimental: como sus hermanos juegan en Temperley, empezó a entrenar con el equipo y el DT Mariano Nóbile (el mismo que dirigió a Atlético Chascomús) lo convenció para sumarse en la lista de buena fe, así que jugará el torneo de Capital Federal. Uno y otro, no se duda, lo hacen por amor al básquet. (Fotos ligateunafoto.com y terra.com.ar)
Los dos fueron compañeros de la selección en el momento más glorioso de la historia del básquet argentino. Walter Herrmann y Gabriel Fernández hace rato que no se ponen la camiseta celeste y blanca, pero por siempre estarán en la historia como parte del equipo campeón olímpico de Atenas 2004. Y si bien hace rato que no juegan en el máximo nivel, no se alejan de la naranja.
Herrmann, en la foto de arriba reporteado por el platense Diego Ruscitti, juega con sus amigos del equipo de Ciudad, en la liga local de Venado Tuerto. Y a Fernández, que hace un año está inactivo, también le dio por lo sentimental: como sus hermanos juegan en Temperley, empezó a entrenar con el equipo y el DT Mariano Nóbile (el mismo que dirigió a Atlético Chascomús) lo convenció para sumarse en la lista de buena fe, así que jugará el torneo de Capital Federal. Uno y otro, no se duda, lo hacen por amor al básquet. (Fotos ligateunafoto.com y terra.com.ar)
TEMPERLEY Y NADA MAS
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