Al menos, el próximo es en casa

Estudiantes tenía claro que la iba a tener muy difícil en el inicio del 2018, donde el fixture del Torneo Federal lo hacía arrancar con cuatro partidos al hilo fuera de casa. Y anoche lo comprobó una vez más, donde no tuvo un mal juego pero perdió 95-87 ante Pedro Echagüe. Eso sí, lo bueno es que la racha fuera de casa ya quedó atrás y el próximo encuentro será en City Bell, donde va a recibir el viernes a Burzaco FC, en un duelo importante para la lucha de abajo en las posiciones de la División Metropolitana. Anoche fue una batalla de estilos ante el duro equipo de Juan Pablo Boadaz, que se hizo muy fuerte en la pintura con los hermanos Fernández y contó además con la mano caliente de Prego para lastimar de afuera (4-6) triples y abrir espacios. El Pincha apostó por el juego rápido cuando pudo correr, el rompimiento de Attademo y las bombas de Cejas y Noguera (nueve entre los dos), el tridente en el que se apoyó en ataque ante un rival con mucho oficio que le cerró el resto de los caminos. Corriendo casi siempre de atrás, los albirrojos entraron en juego al último cuarto, pero entre Gancedo y Prego pusieron una luz indescontable (16 de ventaja faltando apenas tres minutos) y la victoria quedó para los porteños, que en el balance final hicieron pesar la localía.

La síntesis:
Pedro Echagüe (95): Lautaro Cisterna 9, Ezequiel Manzanares 6, Juan Pérez Suchovinky 7, Matías Fernández 12, Germán Fernández 25 (fi); Diego Prego 18, Gastón Gancedo 7, Adriel Acosta 8, Agustín Bavasso 1, Galo Terrera 2. DT: Juan Pablo Boadaz. 
Estudiantes (87): Facundo Attademo 22, Gabriel Cejas 19, Federico Barraza 11, Facundo Vallejos 5, Emiliano Cancinos 5 (fi); Michele Castro 3, Lautaro Noguera 18, Mateo Boccatonda 0, Pablo Marini 4. DT: Mauricio López.

Parciales: 20-19, 41-36 y 66-57. Cancha: Pedro Echagüe. Arbitros: Fabián Catalá y Diego Monti. (Foto prensa Estudiantes)